miércoles, 19 de agosto de 2009

15. LA MEDITACIÓN

Guarda silencio por un rato - pocos minutos - y simplemente observa qué es lo que ocurre… Te sorprenderá que si simplemente contemplas tus pensamientos, sin controlarlos, ellos parecen fluir por si solos, cambiando de un lado a otro, sin un propósito claro. Por momentos crees estar elaborando algo en tu mente, pero lo más probable es que sientas que tus pensamientos cambian de temas, deambulan, como monos trepados en un árbol cambiado de ramas. Si logras tomar distancia de esos pensamientos, si te limitas a observarlos, y si dejas que tu atención se desplace hacia afuera, hacia lo que ocurre a tu alrededor, y luego hacia tu propio cuerpo, a tu respiración, a los latidos de tu corazón, hacia tu piel en contacto con tu ropa, a tu peso, a tus sentimientos, a tus órganos internos, … y no tratas de cambiar nada… estás dando un primer paso a eso que llamamos meditación. Es como si te bajaras del caballo y te limitaras a contemplarlo mientras este pasta o camina, sin control de nadie. Vas a sentir mucha paz. Vas a reconocer que muchas de tus preocupaciones no tienen mucho sentido y que te agotan en el día a día, simplemente porque se repiten y repiten, innecesariamente. Es un camino de aprendizaje, muy importante, practícalo, que te va a ayudar mucho en la vida. Palabra de hombre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario